lunes, abril 14, 2014

Etereodinamia.

Y en todo lo que imaginaba, vos estabas observándome al lado mío, afirmando cada cosa que decía, como si tu presencia me diera la certeza de mundo, de lo real, de lo posible. Por momentos, en mis sueños, sin vos, no había sueños.
Esta es una experiencia que repito y al mismo tiempo alimento; en estas tardes el esfuerzo que realizo para sacarte, implica una energía que es idéntica a la que ejerzo para sacarme del encierro que no es otra cosa que tu recuerdo.