jueves, diciembre 11, 2014

Se va… como tantas otras cosas. Como todo lo que duele, cuando arde.
La decepción, lo inevitable. Simplemente se va.
Y a veces no vuelve, y eso es lo que da más miedo, por lo menos a mí.
Se escurre como el agua entre los dedos, no hay forma de evitarlo.
Ahí va…veo como se aleja. Despido sin querer despedir. Porque ese mismo amor que duele, es el amor amando al irse. Amar yéndose. A veces sin mirar atrás porque entonces vuelve.